Qué mejor manera de empezar este artículo con el pregón pascual del año 2019 escrito por Don Manuel Jáñez para que fuese recitado aquella alborotada plaza de miradas hacia el Resucitado.
"Excelentísimo Señor Obispo de la Diócesis; Excelentísimas e Ilustrísimas Autoridades; Abad, Presidente y hermanos de la Real Hermandad de Jesús Divino Obrero; Representantes de las Cofradías y hermanos de nuestra Semana Santa; Leoneses; Visitantes y hermanos todos. A vosotros, que durante 10 días habéis seguido a Cristo por las calles y plazas de esta bendita ciudad y habéis contemplado con mortificada resignación su pasión y muerte. A vosotros que le visteis llegar a lomos de un borrico y agitasteis con ramos y palmas mientras en el rumor del atardecer se entonaban hosannas de jubilo de San Lorenzo a Puerta Castilla. Que compartisteis con el su cuerpo y su sangre en la Cena de Pascua en esta misma plaza que hoy vuelve a adornar sus balcones con velos de esperanza. Que visteis como le prendían, igual que a un vulgar malhechor en Santa Cruz y le abofeteaban en San Isidoro, para luego ser expuesto al público escaño a la puerta de las Carbajalas. Azotado y coronado de espinas pero mirándonos siempre con su infinita misericordia. A vosotros, que le visteis doblegar su espalda bajo el peso de un madero y le ayudasteis a levantarse cuando cayó exhausto en San Francisco y Santa Marina. Que fuisteis cireneos en San Claudio para ayudarle a cargar la cruz y le escuchasteis consolar a las mujeres que empapaban con lágrimas los cimientos de San Martín. A los que le visteis despojado de sus ropas y arrodillado en el barrio de la Vega y le escuchasteis pedirle al Padre el perdón para los que le crucificaban en San Marcelo entre dos ladrones. A quienes visteis a su bendita madre entrelazar las manos, desecha en lágrimas por la inmensa amargura de contemplar como se le está muriendo su hijo en la Plaza del Grano sin que nadie haga nada para remediarlo. A los que le desenclavasteis en la cruz frente a la Puerta del Perdón y a los que posasteis su cuerpo inerte sobre el regazo de María en Santa Nonia. A quienes le visteis descender a los infiernos, y regresar como un hombre nuevo que extiende su mano para rescatarnos del fuego eterno. A todos vosotros os anuncio una buena nueva. Acercaos y ved como alivia su luto la Reina de los Cielos como cambia su manto para que el negro del dolor se convierta en blanco de alegría. Él lo anunció a todos los que quisieron escucharlo y la Real Hermandad de Jesús Divino Obrero lo lleva proclamando desde hace más de 60 años con el batir de las palomas que azurcen el cielo con sus aleteos de gloria. Mirad y ved leoneses y leonesas, forasteros y forasteras, que antes hubo dolor con su dolor y hoy hay gozo con su gozo. Contemplad la belleza de una estampa que estremece y emociona hasta el llanto. Dejaos azunar por la cadencia de los pasos, por el susurro de los raseos y el olor de las flores. Dejad que el fervor y la devoción de los papones os muestren el auténtico cambio hacia le verdad. Que las marchas procesionales os revistan el alma con sus encajes festivos y lleven vuestros corazones de armonías venerables y temblorosas. Elevad la mirada al cielo porque allí están los que velan nuestros sueños, los que nos llevaron y nos sostuvieron cuando creíamos desfallecer en la primera tirada de la primera puja. Los que nos enseñaron que llegar a Dios por amor es la mejor forma para ser papones con el alma. Los que están sin estar, y son sin ser. Los que se vuelven a asomar a un balcón del cielo para sentir la cálida caricia de los que seguimos honrando su recuerdo a cada paso. Abre tus ojos León y prepara tu alma para recibir las bendiciones del Señor. Mirad como la piedra ya ha sido desplazada, los soldados duermen y el ángel se dispone a anunciar a las mujeres que se acercan al sepulcro la buena nueva. Noble ciudad de León, de murallas y torreones, de paponas y papones que evocan con devoción la dolorosa pasión del Cristo de sus amores, perfuma tu alma con flores pues es gozoso el momento. Se acabaron los lamentos, los llantos y letanías que enlutaron tantos días cuando fuisteis a su encuentro con el alma esgarrada. Se despejó la mirada de la madre dolorosa y hoy sus lágrimas son rosas y sus mejillas luceros de un cielo con luna clara. Noble ciudad de León ten festivo el corazón y prepara la llegada del señor que nos ampara con el amor verdadero. Ya está aquí el Divino Obrero, hacedle sitio en la plaza, que repiquen las campanas con fervor alborotado. Hoy ved como se engalana el cielo de la ciudad con tul de felicidad con aleluyas y hosannas porque es Domingo de Pascua. Cristo ha resucitado"
Manuel Jáñez
Una Semana Santa atípica desde luego, de reflexión y oración. Una Semana Santa que aunque todos supiéramos lo que sucedería nos destrozó por dentro. Aquel viernes de marzo a todos nos llegó un aviso de la Junta Mayor de Cofradías de nuestra ciudad: "La Semana Santa queda suspendida debido a la emergencia sanitaria". Una decisión que devastó a todos los que nos consideramos hermanos de Cristo durante el año y más en esta Semana de Pasión. Una decisión que tomaron seguramente con lágrima en los ojos.
Todos lo teníamos asumido pero lo que no sabíamos era el dolor que nos proporcionarían las siete espadas en el corazón tras salir la Dolorosa del Mercado. El sufrimiento que tendríamos al ver a aquel Cautivo con miedo caminando hacia San Martín. La tristeza del niño que este año llevaría la palma más alta pero que nunca pudo ser. Este año no habría cansancio en los hombros de las mujeres que mecían la Virgen del Gran Poder, ni volveríamos a los aires de antaño con la Sobarriba en Santa Cruz seguidos del sonido de la horqueta acompañada de marchas de muerte y melancolía. No habría hermanamiento de las tres negras ni rosarios de Lunes Santo. El Perdón se quedaría sin su saeta al titular y Angustias moriría por el dolor de su Madre. La Amargura se quedaría con sus Madre Concepcionistas y en las calles no se respiraría el Silencio de Medinaceli ni se notaría la presencia de un Vía Crucis morado y amarillo. A las 12:00 de la noche nadie saldría de San Marcelo para adentrase en la muralla al son de la Madrugá. San Claudio no se despertaría para ver al Moreno en la mañana del Jueves Santo y María del Dulce Nombre no caminaría hacia la Esperanza. La Virgen de los Reyes no sería la misma su manto y palio, guardada en su local, y el pan de la Sagarada Cena lo tomaríamos en casa junto a los familiares que debíamos cuidar. No habría un desagravio en las Clarisas ni una Ronda para despertarse e ir a Santa Nonia con el capillo en mano. El Nazareno se quedaría en Santa Nonia junto a la Virgen de la Soledad sin su palio y el Balderas nos daría su ayuda desde el templo. El brazo del Cristo del Desenclavo no se bajaría y el Hombre Nuevo no entregaría el fuego en San Martín, Concepcionistas o San Marcelo. La Soledad no se cambiaría el manto frente a su hijo en la mañana y no se recitarían las palabras de "Felices Pascuas".
Desde esta página web, queremos dar las gracias a todas las personas que han hecho que esto no haya sido así.
Gracias a la Junta Mayor de Cofradías y Hermandad de León y a las distintas cofradías de nuestra ciudad (incluyendo sus grupo jóvenes y formaciones musicales) que nos han ofrecido todo lo que nos perdíamos en los días de sus procesiones y actos. Además de al Grupo de Jóvenes Papones (al cual pertenezco) que día tras día consigue difunir la Semana Santa, a nosotros los jóvenes
Gracias a las televisiones públicas y privadas, entre las que destacamos a 987, Mediaplanet, Leonoticias y la 8 León por traernos todas las procesiones de nuestra ciudad y hacer que esta situación fuese más llevadera.
Gracias a todos las cuentas de Instagram, Facebook y Twitter que día tras día nos mostraba sus mejores contenidos, entre las que quiero destacar a @_calle.amargura_ que realizó un seguimiento total a todas las procesiones. También agradecer a @_tras.tu.paso_ @ssantaleon_ @pasionsacramentalypenitencial @albrazoyalhombro @cofradeleones @paponleones2020 @pipays6 @raseocofrade @papondleon @cofradesleon @meciendo_el_paso_leon @papones_de_leon @seiseleon @pasion_leonesa @portalpapones @redoblecofrade
Gracias a todos los papones que os habéis quedado en casa para que esto se frenase lo antes posible, pero con tristeza por no acompañar a vuestro Cristo o Virgen.
En conclusión gracias a todo el mundo que hayáis hecho que esto haya sido mucho más fácil para todos. Y volveremos...claro que volveremos pero más fuerte que nunca.
Felices Pascuas a todos, hermanos. Que Jesús, que entregó su vida por nosotros y resucitó de entre los muertos nos ayude a superar esta difícil decisión para todos nosotros.
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